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lunes, 17 de marzo de 2008

Licántropos y la Purga


En Eberron, el alineamiento de una licántropo no esta vinculado con su forma animal. Un hombre oso puede ser malvado y un hombre lobo puede ser bueno. Los licántropos que portan una vena malvada son algunas de las criaturas más terribles de Eberron: Aunque un hombre lobo natural puede mostrar una forma humana, es un depredador de nacimiento que disfruta derramando sangre humana. Aquellos infectados por la enfermedad sufren un cambio dramático en la personalidad, sin importar el alineamento de la vícima antes y después de la maldición. Como resultado, los licántropos de todo tipo siempre han sido temidos. Bajo las mejores circunstancias, el mordisco de un licántropo significa un perdida de identidad; en el peor, puede volver a una persona buena en un asesino cruel.

Para una licántropo infectado, esta transformación mental es permanente. Incluso los más fuertes caerán ante el poder sobrenatural de la enfermedad -y solo los efectos mágicos como Milagro o Expiación pueden devolver la anterior personalidad a la víctima. Un licántropo natural no puede ser curado; la enfermedad es una parte de su cuerpo y alma, y no puede ser separada. El licántropo nacido en el mal puede encontrar la fuerza para volverse bueno, pero siempre sentirá al depredador en lo más profunod de su mente, impulsándole a cazar al débil y al inocente.

El origen de la licantropía sigue siendo un misterios que desafía incluso a la adivinación; Comunión y Conocimiento de Leyendas producen informes cripticos y a menudo contradictorios sobre las lunas hechas humanas y la oscuridad interior. Los sabios de Arcanix y de la Biblioteca de Korranberh han creado muchas teorías, remotando la enfermedad hasta los daelkyr, el Crepúsculo, zonas de manifestación vinculadas a Lamannia o antiguos druidas. Una teoría más exótica proviene de los Confines de Eldeen. Una cantidad de tribus cambiantes creen que las lunas de Eberron son poderosos espíritus que vigilan el mundo de debajo. Estos cambiantes mantenien que la raza cambiante no desciende de los licántropos: en su lugar, los primeros licántropos fueron creados de los cambiantes. De acuerdo con esta leyenda, la luna Olarune buscaba crear guardianes que pudieran proteger el mundo de la naturaleza; descendiendo del cielo, tocó a un puñado de cambiantes seleccionados, otorgandoles poder para asumir completamente formas animales. Pero los Oradores de la Luna dicen que un decimetercero espíritus esta en el cielo -una luna oscura que esconde su faz del mundo. La oscuridad corrompió el don de Olarune, infectando a muchos de sus elegidos con la locura y la maldad. O asi es contada la historia. Los cambiantes con estas creencias han cazado licántropos malvados durante siglos: sencillamente carecían de los recursos para eliminar la amenaza. Aunque estos cazadores son una minoría entre los cambiantes, como raza los cambiantes no tienen gran apego por los licántropos. Una comunidad cambiante puede correr los riesgos de acoger a un licántropo bueno, pero ninguna persona sensible aceptaría conscientemente aceptar a un hombre lobo malvado en su hogar.

Aunque nadie sabe como comenzo la licantropía, la mayoría conocen la purga que casi la llevó a su fin. Alrededor del 800 AR, el poder de la maldición comenzo a crecer. Los eruditos de Aundair buscaron una solución en las conjunciones planares o en la influencia de demonios desconocidos, mientras en las profundidades de los Confines de Eldeen los cambiantes oradores de la luna lamentaban el creciente poder de la luna oculta. Los licántropos malvados -siempre más numerosos que los cambiantes- se volvieron incluso más violentos, y muchos licántropos buenos y neutrales fueron corrompiros y atraidos hacia la oscuridad. Los licántropos aquejados ganaron la habilidad de transmitir su maldición a sus porpias vítimas, permitiendo a la licantropía extenderse con velocidad extrema. En los primeros años del siglo noveno, manadas de hombres lobo recorrian todo el Khorvaire occidental y los hombres ratas habían establecido madrigueras bajo las grandes ciudades de la era. Los granjeros vivína con el temor a los lobos que caminaban como hombres. Lo que una vez era una superstición utilizada para asustar a los niños ahora era una terrible realidad.

La Purga

Los templario de la Iglesia de la Llama de Plata han combatido a los licantropos en el pasado. Pero el corazón de la Iglesia de la Llama de Plata estaba en la nación de Thrane, lejos de los tradicionales guaridas de Eldeen de los licántropos. Cuando la mortalidad aumentó en Aundair y Breland, los cardenales aumentaron su preocupación y los templarios comenzaron a tomar un papel más activo en la defensa de las tierras occidentales. Los eruditos puritanos de la Llama de Plata comenzaron a estudiar a sus enemigos. Unos factores determinaron esta investigación:

  • Los sujetos de estudio eran licántropos malvados. Los licántropos buenos eran raros y solitarios como para empezar con ellos, y muchos habían caido presa del creciente poder de la maldición. Como resultado, los puritanos rapidamente asumieron que todos los licántropos eran inherentemente malvados.
  • Muchos sacerdotes notaron la similitud entre las formas híbridas de los licántropos y la forma común de los rakshasa, y afirmaron que los licántropos eran demonios o se convertirían en verdaderos diablos con el tiempo.
  • Curar la licantropía es un dificil reto. Los licántropos naturales no puden ser curados, y un licántropo aquejado puede ser curado solo si lo desea; el cambia formas siempre puede elegir fallar el tiro de salvación de Voluntad asociado. El primer sacerdote que busco una cura decidió que era imposible; solo en las últimas década de la purga un grupo de más moderados y morales sacerdotes demostraron que podía ser realizada.
Ademas de esta busqueda infructuosa, el Guardián de la Llama tenía su propia agenda. Jolan Sol considero la situación como una oportunidad de reforzar la influencia de la Llama de Plata en Aundair. En el 832 AR proclamó que la maldición de la licantropía corrompía el alma misma. Este anuncio extendió el miedo por todo Breland y aundair y reforzó el propósito de los ejercitos de la Llama, que se aventuraron hacia occidente con el fin de erradicar la plaga de la faz de Eberron.

La lucha fue larga y feroz. Hoy, muchos asumen que los licántropos fueron cazados, huyendo de la superior fuerza de la Iglesia de la Llama de Plata. Poco puede estar más alejado de la verdad. El típico hombre jabalí es mucho más mortal que el templario medio de la Llama, e incluso si el soldado vence a su presa, un buen mordicos es todo lo necesario para transferir la maldición y crear un nuevo hombre jabalí. Los hombres lobos malvados infectaron pueblos enteros, y los hombres ratas disfrutaban infectando a los templarios, aprisionandolos hasta que la maldición les poseía, y luego enviandolos contra sus antiguos aliados. Los listos licántropos desviaron la paranoia de los puritanos hacia los cambiantes, y estas gentes engañadas masacraron a cientos de cambiantes antes de que alguien pudiera demostrarles que los cambiantes no portaban la maldición. Aunque algunos de los cambiantes lucharon junto con los templarios más adelante, muchos nunca han perdonado a la Llama de Plata -y de hecho, a la humanidad- de estas muertes.

A medida que la marea comenzó lentamente a cambiar a favor de la Iglesia de la Llama de Plata, el reto se convertió en descubrir a los licántropos ocultos en las comunidades humanas y cambiantes. Otra vez, muchos puritanos actuaron con una agresividad , dañando a los inocentes en su desesperada misión de eliminar los restos de los cambiaformas. Por fin la Casa Medani produjó focos de cirstales dragontinos que podían detectar licántropos y guio a los templarios hacia sus verdaderos enemigos, y esto anunció el fin de la purga. Alrededor del 880 AR, la Iglesia de la Llama de Plata retiró sus fuerzas de los Confines de Eldeen, clamando que la amenaza de la maldición finalmente había sido eliminada.

Licántropos y la Era Moderna

Hoy, el equilibiro de poder dentro de la Iglesia de la Llama de Plata se ha inclinado hacia los moderados, y muchos sienten vergüenza y pesar por las acciones de sus predecesores. Aunque era necesario detener a los licántropos malvados, la paranoia y el fanatismo de la era llevaron a la muerte de inocentes. Sin embargo, logró un fin: la Llamda de Plata ganó muchos seguidores como resultado de la purga, y Aundair es un bastión de la facción puritana en la era moderna. Los puritanos rechazan considerar la purga expeto una victoria; la mayoria han crecido con los cuentos de los horrores de principios del siglo noveno. No sienten vergüenza por las muertes de los licántropos no malvados o por las víctimas aquejadas que podian haber sido curadas; a ojos de los puritanos los licántropos son monstruos -y el deber del templario es defender al inocente del mal, no sentir piedad por los monstruos.

Aunque la Iglesia de Thrane ya no sigue las doctrinas de Jolan Sol, la iglesia continua cazando cambia formas a día de hoy. Jaela Daran ha ordenado a los templarios sojuzgar a los licántropos siempre que sea posible y aceptar la rendición de cualquier licántropo, para que así el cambia formas puede ser curado o exiliado a Lamannia. Sin embargo, si un licántropo no coopera, los templarios usan la fuerza letal. Esto esta cubierto en las estipulaciones en el Código de Galifar; los templarios de la Iglesia están autorizados a defender a la gente de las Cinco Naciones contra las amenazas sobrenaturales, y un licántropo que voluntariamente mantenga su condición es visto como un riesgo intencional hacia los demás. Los puritanos de Aundair son infames por ignorar los edictos de Jaela, y la mayoría de templarios de Aundair no muestran misericorida cuando tratan con licántropos.

Aunque los cardenales y la Guardiana mantiene que la licantropía es una amenaza, se han extendido considerables rumores sobre licántropos excepcionales a los que se les ha sido permitidos permanecer en Eberron. Algunos dicen que la Iglesia capturó a un hombre oso que habían estado combatiendo aberraciones en los Confines de Eldeen, y que la Guardiana de la Llama lo liberó en el campo tras escuchar su historia. Algunos puritanos de Aundair han extendido chismes que afirman que Jaela misma es un licántropo; si las historias dicen la verdad, puede ser que la Llama de Plata la seleccionó en un intento de curar el daño hecho en su nombre. Entre el prejuicio común y la necesidad de aclarar las cosas con la Iglesia, Eberron es un escenario desafiante para PJs licántropos. Pero el heroe persegudio que debe combatir con sus propios oscuros impulsos puede ser un protagonista fascinante, y tal personajes seguramente puede encontrar un sitio en Eberron.

Fuente: Wizards of the Coast (Lycanthropes and the Purge)