Sabemos que las lealtades de un pathfinder a menudo se dividen entre la Sociedad y la nación donde nació. Solo pedimos que te esfuerces en anteponer tus intereses en descubrir y explorar a los intereses de tu país.
-Capitana Empresaria Alissa Moldreserva
En la Parte I, desvelamos nuestra primera facción, Andoran, y hablamos un poco sobre el sistema de facciones que usaremos en el Juego Organizado de la Sociedad Pathfinder. En la Parte II, desvelamos nuestra segunda facción, Cheliax, y hablamos brevemente sobre el prestigio de facción, como se consigue, y que significa para para el mundo de Golarion y que significa para tí como miembro de la Sociedad Pathfinder. En la Parte III, desvelamos nuestras tercera facción del Juego Organizado de la Sociedad Pathfinder: Osirion, La Tierra de los Faraones. En la Parte IV, te traímos la cuarta facción: Qadira, el reino desierto fronterizo, puerta de entrada al inmenso continente de Casmaron, y el estado satrapa más occidental del Imperio Padishah de Kelesh. Para la Parte V, descubrimos la última facción: Taldor, el decadente, impero caído de Golarion, con sus tentáculos aún aferrandose fuertemente a las orillas del Mar Interior.
TALDOR
Decadente Imperio Caído
El sol del imperio Taldor se ha puesto. Depende de nosotros que se alce de nuevo en nuestro momento.
-Barón Jacquo Dalsine
El Antiguo Taldor una vez gobernó la entera costa septentrional del Mar Interior, desde la bella dorada Oppara hasta la salvaje forntera de Varisia. Ahora esta reducido a un cuarto de su antigua gloria. Mientras el Antiguo Taldor volvía su vista hacia el interior, sus vasallas y conquistadas colonias lentamente se separaron sin una batalla. Andoran y Cheliax se escindieron hace cientos de años, y unos pocos en Taldor tuvieron tanto el deseo o la motivación de ir a la guerra para detenerlos. ¿Porque preocuparse con insignificantes disputas en el campo cuando tu propia destrucción política esta teniendo lugar en la centro de la alta sociedad Taldoriana?.
Es fácil olvidar la antigua gloria de Taldor y acusar al país entero de ser una banda de estupidos narcisistas que pasan más tiempo acicalando sus pelucas que defendiendo sus fronteras o reprimiendo las rebeliones que surjen dentro de sus grandes ciudades. Pocos saben que mientras que la mayoría de la alta sociedad estás más preocupada con la moda de la estación que por el bien del imperio en decadencia, unos pocos de los operativos más peligrisos del mundo están involucrados en el constante campo de batalla de las rivalidades de Oppara. Las antiguas enemistades entre las antiguas casas han sumergido la Ciudad Dorada en una indefinida violencia y oscuros asesinatos durante cientos de años, y más de un reparto competitivo de diestros aventureros ha revivido las rivalidades, tanto como en musculos de alquiler o como vastagos de casas nobles mezclados en estos hirvientes calderos de sangre derramada.
Los taldorianos son vividores decadentes, que prefieren suculentas comidas, trajes vistosos y complementos enjoyados incluso para la mayoría de menores acontecimientos casuales. Para un Taldoriano, la apariencia es una expresión del poder, y un agudo sentido de la moda representa una aguda mente. Su aprecio por las artes se extiende más allá de la moda y de la pintura, interesandose en la hechicería, en los duelos y en las turbias estrategias políticas y en la guerra. Una mente Taldoriana, cuando es enfurecida, es una cosa peligrosa, y el resto del Mar Interior esta por recibir una doloroso recuerdo de este hecho intemporal.
Insignificantes diferencias y antiguas rivalidades han convertido lentamente a Taldor de una gran joya pulida a un trozo desperdigado. La clave para restaurar el sentido del deber del imperio yace en encontrar un enemigo al que culpar de las dividas facciones de Taldor, un valioso esfuerzo en redescubrir la augusta gloria pasada de la nación. Controlar las riendas políticas de Absalom es la medicina perfecta para la enfermedad que se extiende profundamente por los huesos de Taldor.
Metodología: Lobo y Tigre
Nuestra debilidad debe ser ahora nuestra fortaleza: siglos de insignificantes luchas nos han proporcionado un arma -¡seguramente no hay nadie que puede reclamar una verdadera maestría en la intriga como lo hacemos los Taldorianos!.
-Barón Jacquo Dalsine
La estrategia de Taldor para conseguir el control de Absalom consiste en volver a sus enemigos unos contra otros. Información errónea y guerra psicológica están a la orden del día. Las misiones Taldorianas tiene que ver con hacer estallar antiguas enemistades entre Qadira y Osirion, conducir a Cheliax y a Andoran a reavivar su antigua guerra. "Arroja al lobo sobre el tigre y el trabajo del cazador esta hecho" es una antiguo refrán Taldoriano, y el mantra segun el cual los agentes de Taldor crean caos alrededor del Mar Interior.
Fuente: Exploring Paizo's Pathfinder Society Organized Play, Part 5