A noventa millas al oeste de las ruinas de Tilverton, en el corazón de las desoladas Tierras Pétreas, se alza una colina sin nombre, cuyas laderas están coronadas por una hace tiempo ruinosa villa. Poco queda en la superficie, pero debajo de la colina se haya una gran cueva horadada en la piedra por un furioso torrente ahora desparecido. Esta es la Caverna de la Muerte -dominio del liche Asbarón, quien vivió y murió hace más un milenio. En este oscuro y terrible lugar aún permanece, su mente perdida hace tiempo en una locura intencionada.
Asbarón de los Ojos Esmeralda
Nacido en el destruido reino de Anauria en el 199 CV, el Año del Encantador Frío, Asbarón viajó extensamente y coleccionó una gran cantidad de saber peligroso a medida que prolongaba su vida gracias a oscuros pactos y rituales. Sumamente antiguo y cruel, finalmente cruzó hacia la no muerte, convirtiéndose en un liche. Cientos de años después de la caída de Anauria, regresó al hogar ancestral de su familia y estableció su guarida en las cavernas de debajo.
Asbarón ha pasado siglos obsesionado con los destinos de dos familias hace tiempo dispersos: su propia Casa Nemrin y sus rivales de la Casa Maluradek, ambas familias nobles del antiguo reino de Anauria. Desde su temprana infancia, Asbarón fue criado en el odio implacable y la bilis de su bisabuelo Ashkelos, un brujo arcano que creía primero que la Casa Nemrin estaba destinada a gobernar un poderoso reino, y segundo que la traición y la envidia de la Casa Mularadek le arrebató a la Casa Nemrin la posibilidad de gobernar Anauria. En la deformada visión de Ashkelor, Anauria nunca hubiera caído si un Nemrin se hubiera sentado en el trono, y vertió su odio y resentimiento en Asbarón a través de la infancia de Asbarón y sus tempranos estudios.
¿Un Vástago de los Maluradek?
En los trece siglos desde la caída de Anauria, la familia Maluradek hace tiempo se diluyó en la general población humana del Faerûn occidental. Literalmente miles de personas puede trazar su descendencia de unos de los Maluradekes vivos durante los últimos días del reino... incluyendo, quizás, un humano o un parcialmente personaje jugador. A través de una diligente búsqueda y trazando los variados árboles familiares, el liche Asbarón descubre que uno de los personajes del grupo es un descendente Maluradek. Envía a sus sirvientes para que asesinen al personaje en cualquier esquina distante de Faerûn en las que los héroes se encuentren. Cuando los personajes jugadores rastren a los asesinos de vuelta a su origen, descubren que algún hasta ahora enemigo insospechado que acecha en las Tierras Pétreas parece que se las tiene jurada -un razón perfecta para investigar las viejas historias de la Caverna de la Muerte.
Ashkelor murió hace un milenio, pero Asbarón aún recuerda las lecciones de su bisabuelo. Para enmendar este antiguo error, Asbarón ha pasado siglos de su existencia no muerta buscando los extensos descendientes de la Casa Nemrin, esperando encontrar uno adecuado para un trono (y un trono adecuado para ese Nemrin). Está exigiendo un cruel juicio a la progenie de su familia, y busca un descendiente de voluntad de hierro, aguda inteligencia, poderosa ambición y vigor mágico. Cualquier descendiente que no de la talla es ignorado... o, en el caso de ser verdaderamente débil, borrado del árbol familiar. El liche pasa la mayor parte de tu tiempo rastreando herederos ocultos de la antigua sangre Nemrin y espiando a aquellos que descubre, buscando la correcta mezcla de personalidad, aptitud y actitud. Al mismo tiempo, Asbarón ha hecho su cruzada personal eliminar a los descendientes de los Maluradek dondequiera que los encuentre. Aún no tenido éxito en completar la exterminación de esta antigua línea, y el conocimiento de que los descendientes de aquellos que "traicionaron" su casa hace un milenio aún caminan por Faerûn lo enloquece de manera absoluta.
También, Asbarón esta ocupado en una disputa de hace años con los Zhentárim. Primero de todo, sus secuaces han saqueado las caravanas Zhentárim que buscaban pasar por las Tierras Pétreas en más de una ocasión. Segundo, los secuaces de Asbarón recientemente ha asesinado a un señor menor del Alcazar Zhentil después de que el liche lo identificará como descendiente Maluradek. Por lo tanto los Zhentárim han enviado varias expediciones contra Asbarón, pero cada uno ha terminado en fracaso.
Como maestro de la magia de las gemas, Asbarón tiene una especial afinidad por las esmeraldas. Dos grandes, perfectas esmeraldas descansan en las cuencas de los ojos del liche, rodeadas de las impías verdes llamas que arden allí. Docenas de gemas más pequeñas están adheridas a sus viejos huesos amarillentos, muchas encantadas con poderosos conjuros.
Siervos de Asbarón
Como uno puede suponer, los siervos de Asbarón incluyen una cantidad de muertos vivientes -mayoritariamente esqueletos y tumularios de varios tipos. Muchos fueron guardas o mercaderes de aquellas caravanas que fueron atacadas, y saqueadas por los secuaces de Asbarón. El liche también gobierna sobre una gran tribu de trogloditas, un grupo de gárgolas y una variedad de guardianes monstruosos como leucrotas, mantícoras y un gorgón.
Los trogloditas de la Llama Verde son los siervos más numerosos de Asbarón. Las cavernas Nemser hace tiempo fueron invadidas por criaturas simples, que veneran a Asbarón como un dios. El liche promete a los jefes y chamanes de los trogloditas un existencia perpetua en forma de muertos vivientes si le sirven bien. El pacto siniestro de Asbarón es tan atrayente que los guerreros de la Llama Verde literalmente están deseoso de morir al servicio de su señor muerto viviente, esperando demostrar tal lealtad y valentía para ganarse un mayor puesto cuando el liche los levante a la no muerte.
Las gárgolas leales a Asbarón habitan los abandonados sótanos y pasadizos del viejo Nemsergaar, a antigua sede de la familia. Su habilidad de llegar tan lejo incluso más allá de las Tierras Pétreas en busca de botín o emprender largas misiones a cientos de millas de la caverna las hace especialmente útiles. Asbarón a menudo las envía a robar libros y genealogías de las bibliotecas y templos, asesinar a los Maluradek que descubre, o llevar regalos o avisos a cualquier Nemrin al que actualmente favorzca. Como los trogloditas, también sirven al liche por la promesa de la existencia etetna.
Por supuesto, las mascotas monstruosas de Asbarón no tiene tal deseo. El liche controla a sus secuaces más poderosos a través de un ritual por el cual incrusta una mágica esmeralda en la carne de la frente de una criatura viva. La gema ritual domina a la criatura subyugada, y también le otorga a Asbarón la habilidad de percibir lo que sus monstruos esclavizados perciben y enviarles ordenes telepáticas a una distancia sustancial. Asbarón no puede ver a través de todas sus gemas constantemente; en la práctica sólo se centran en un monstruo en particular durante unos pocos minutos en un momento dado una vez al día o así (o más atentamente si tiene una razón para estar vigilantes).
Una pequeña cantidad de poderosos lugartenientes (el chamán troglodita, el jefe de las gárgolas y unos pocos de los muertos vivientes) portan estas gemas, no solo para asegurar su lealtad sino como signo de favor. Estos individuos son concidos como los "Ojos Jefes" de Asbarón, y son muy temidos por las demás criaturas de las cavernas y las ruinas debido a que hablan directamente por el liche, ordenando a sus secuaces. Asbarón mismo raramente se digna a hacer esto.
Las Cuevas Nemser
Bajo las antiguas ruinas de Nemsergaar, la antigua sede de poder de la Casa Nemrin, se encuentra un laberinto de piedra caliza viviente creado en el mismo corazón de la colina por las corrientes una vez torrenciales nacidas en las nieves de los Picos del Trueno. Estas cuevas son bastante bellas en muchos lugares, adornadas con cascadas congeladas de piedra fluida, estanques mineralizados, corrientes vivas y amplias galerías. En su mayor parte, están sin drenar y muestra poco trabajo. Hay dos entradas principales: Una escalera de peldaños desciende desde las ruinas del palacio de arriba, y una gran caverna se abre a unas cientas yardas donde el arroyo que fluye por las cuevas emerge. Las gárgolas invaden las ruinas y vigilan la entrada superior, mientras que la inferior lleva rápidametne hacia una madriguera laberíntica troglodita.
La Caverna de la Muerte misma es un gran, en forma de campana, pozo o foso, en el centro del complejo. La entrada esta cerca del techo de esta caverna de cientos de pies de alto. Esta es una de las pocas habitaciones que han sido sustancialmente trabajadas, y una escalera de piedra baja hacia el suelo pasando por delante de bajorelieves de figuras esqueléticas y docenas de nichos donde esqueletos reales permanecen. Una capilla a Orcus ocupa el suelo de la cueva, que normalmente esta iluminada por fantásticas verdes llamas arden en blasones de hierro por todas las paredes. Las habitaciones personales del liche, taller, biblioteca, cámara del tesoro y habitación de trofeso están todas comunicadas con esta caverna, y un secreto túnel de escape lleva abajo hacia las profundidades de la Infraoscuridad bajo las cuevas.
La Casa Nemrin de Anauria
Tras la caída de Nezheril en el Año de las Telarañas Hendidas (-339 CV), tres pequeños reinos sobrevivieron a la destrucción del gran imperio: Anauria, Asram y Hlóndazh. Anauria era la más rica de estas tres. Se hallaba en las extensas tierras al norte de los Picos del Trueno, en la parte del Anaurokh que hoy es conocida como la Espada. En los días de Anauria, las Tierras Pétreas eran verdes y boscosas, unas tierras altas bien regadas por rápidos arroyos que bajan corriente abajo desde las montañas al sur. Una cantidad de familias nobles de Anauria construyeron pabellones de caza, villas y palaciones de verano en las colinas, retirándose a las elevaciones más frescas durante los meses de calor del año. Una de estas familia era la Casa Nemrin, un familia de ricos nobles que ostentaban gran influencia en los asuntos de Anauria.
Durante los últimos años del reino, los Nemrins cayeron en la deshonra. Acusada de traficar con demonios y de planear una rebelión por una rival familia noble -la Casa Maluradek- Lord Ashkelor Nermin de encontró expulsado de la corte en base a las pruebas presentadas al rey por sus rivales. Ashkelor se mudó a la relativa soledad del palacio de vernao de su familia en las colinas, Nemsargaar. Aquí Ashkelon planeó su venganza contra sus acusadores y esperó su justificación ante el rey.
La justificación de Ashkelor nunca llegó. Una gran horda orca descendió desde aridas extensiones del norte del Anaurokh en el Año de los Guardias Caídos (111 CV), destruyendo las ciudades de Anauria y saqueando sus posesiones campestres. Bandas errante de monstruos saquearon la mayoría de fincas en las colinas al sur. Nemsergaar fue saqueado e incendiado durante una de estas incursiones, y dejada en ruinas. Las mayoría de anaurianos murieron bajo las hachas de los orcos, o huyeron hacia otras tierras, para nunca regresar -pero los Nemrin se quedaron. Un brujo arcano de no poco poder, Askhelor Nemrin escondio a su familia en las cavernas bajo Nemsergaar y sobrevivió a la destrucción de su hogar.
Tras la caída de Anauria, Ashkelor surgió para reclamar lo que había quedado del reino -pero fue un vano alarde. Durante unas pocas generaciones, los supervivientes Nemrin se aferraron a su reclamación e intentaron reestablecer el reino, pero nada surgió de sus esfuerzos. Con el tiempo el resto de los Nemrin se dejaron llevar y finalmente abandonaron la destruida Anauria. Asbarón, el bisnieto de Ashkelor, un brujo arcano incluso más formidable que su ancestro, fue el último de la línea en nacer en Nemsergaar.
Fuente: Wizards of the Coast (The Cavern of Death)