Los DMs deberían seguir leyendo. Los jugadores deben ser avisados que si lo hacen se arriesgan a saber más de lo que deberían...
Aventura 4: Castillo Dragasta
Por Christopher Perskins y Robert J. Schwalb
El Castillo Dragasta es una de las ruinas más famosas en la Costa de la Espada. Construido por un aventurero llamado Daeros Dragasta, a lo largo de los siglos el castillo una vez poderoso ha sido hogar para una sucesión de bestias y monstruos malvado, desde ejércitos orcos a dragones y diablos; solo para ser explorado repetidamente por aventureros y otras fuerzas alineadas contra el mal. Los aventureros son atraidos al castillo en ruinas por un enemigo vengativo que sabe que el mal adopta muchas formas, y que el bien no siempre vence.
"Castillo Dragasta" supone que los personajes están al menos en el nivel 9º. Hay un espacio de seis meses entre esta aventura y los eventos de la aventura anterior, asi que es razonable suponer que los personajes de poco poder puedan alcanzar el nivel deseado, ya sea a través de entrenamiento o llevando a cabo misiones personales en el intermedio.
Preparando el Escenario
Los aventureros pueden cambiar el mundo, y las acciones que llevan a cabo y las elecciones que toman a veces puede regresar para atormentarlos.
Hace casi veinte años, un rakshasa llamado Nadir desencadenó una campaña de terror en la lejana Suzail infiltrándose en la corte real de Cormyr y asesinando a un puñado de nobles cormytas. Un grupo de aventureros liderados por un paladín de Amaunator llamado Isteval perseguió al demonio y encontró su guarida subterránea. Isteval y sus compañeros combatieron y mataron a los esbirros del rakshasa, pero Nadir huyó. Cuando Isteval regresó a la superficie, descubrió a su caballo masacrado y a su fiel escudero, un prometedor joven llamado Eldrin Hauun, desaparecido. Días después, un mensajero entregó el símbolo sagrado ensangrentado de Eldrin al templo. Isteval se guardó el simbolo sagrado pero nunca volvió a ver a su escudero.
Con la ayuda de adivinación mágica, Isteval y sus compañeros acorralaron al rakshasa en su palacio real, matándolo antes de que pudiera causar un daño incalculable con el disfraza de un respetado Mago de la Guerra cormyta llamado Norvin Tarrlock, cuyo cuerpo apareció una semana después en la bodega hundida de una caravela sembiana naufragada en el fondo del puerto.
El espíritu del rakshasas fue expulsado a los Nueve Infiernos y languideció allí, atormentado y sin poder, durante más de una década. Finalmente, como pasa con todos los rakshasas, el espíritu de Nadir fue liberado y se reencarnó en su forma física. Desde entonces, el rakshasa ha continuado sus malos caminos, pero ha tardado años planear su venganza contra Sir Isteval, cuya piedad y dedicación por la destrucción del mal es digna de la atención de Nadir.
Nadir ha estado siguiendo el viaje al oeste de Isteval desde Cormyr a la Costa de la Espada. Finalmente el rakshasa ha encontrado al paladín "retirado" en Vado de la Daga, aunque desde entonces ha descubierto que Isteval dirige una amplia red de aventureros extendida por todo Faerûn occidental.
Sencillamente matar a Isteval no es suficiente, ya que seguramente alguien tendría los medios para alzar al paladín de la muerte. No. El plan de Nadir es desgarrar el espíritu de Isteval de su cuerpo y enviarlo a los Nueve Infiernos, para que asi Isteval puede experimentar el mismo tormento que experimentó Nadir. Además, el rakshasa pretende asegurarse de que el espíritu de Isteval nunca escape.
Ninguna victoria estaría completa sin un registro de ello, y Nadir sabe que la historia no la escriben los victoriosos sino por los testigos. Por ello, Nadir quiere que los amigos cercanos de Isteval, individuos respetados cuya palabra tiene importancia, presencien la caída del paladín y extiendan la noticia de su ruina por todo Faerûn. Entran los personajes jugadores.
El Objetivo del Grupo
El objetivo final de los personajes es salvar a Isteval de la ira de Nadir. El paladín esta indignado de que el demonio usase la forma de Eldrin Haunn, su escudero muerto, para provocar un enfrentamiento en el Castillo Dragasta. Isteval tampoco puede ingorar la posibilidad de que el rakshasa podría intentar abrir las puertas del infierno.
Los personajes acompañan a Isteval en lo que podría ser su última aventura. En el Castillo Dragasta, se enfrenta a una elección desalentadora: permitir a los diablos pasen en mase por el portal y una vez ganen un asidero en la Costa de la espada, o permitir que Isteval se sacrifique para cerrar el portal. Los personajes inteligentes deben encontrar una tercera solución, una que salve a Isteval y selle el portal. Si lo hacen, pueden privar al rakshasa de su venganza, eliminarle, y condendar su espíritu a los Nueve Infiernos para toda la eternidad.